Dálmata
- Altura: De 50cm a 60cm.
- Peso: Unos 20 kg.
- Capa: Blanca moteada de negro.
- Aptitudes: Perro de caza o guardián.
Origen
Los orígenes del Dálmata generan bastante controversia
pero lo que se puede asegurar es que, durante siglos, han ido
apareciendo varias representaciones pictóricas de unos perros de capa
blanca moteada que podrían ser esos ancestros tan buscados. A finales
del siglo XVII se dio a conocer la raza en Inglaterra y rápidamente, los
cocheros, comenzaron a utilizar estos perros como vigilantes en sus
viajes. A mitad de camino, mientras los viajeros pasaban la noche en la
posada, los Dálmata, instalados en el interior del
carruaje, vigilaban el equipaje. A partir del siglo XIX, la raza dejó de
ser utilizada para la guarda y se convirtió en una de las razas de
compañía más preciadas por la nobleza.
Comportamiento
El Dálmata es testarudo, independiente, amistoso y
payaso. A pesar de la fama de rebelde, este es un perro con una gran
capacidad de adaptación y aprendizaje. De pequeño se le ha de educar con
firmeza ya que es fácil que coja malos hábitos y que luego cueste
corregirlos. Le gusta correr, saltar, jugar y sentir la presencia y el
afecto de los dueños. Con los niños es muy dulce y se adapta
perfectamente a sus juegos.
Aspecto
La principal característica del Dálmata es su capa
blanca moteada de manchas negras o bien marrón-hígado. Es un perro bien
proporcionado, musculoso y fuerte. Sus orejas son de implantación alta,
bastante anchas en la base y se van adelgazando. Su cola llega hasta el
corvejón, es fuerte en la base y va disminuyendo gradualmente hasta la
extremidad. El pelo es corto, duro, denso, de aspecto liso y brillante.
Salud
El mayor problema que puede padecer el Dálmata es la sordera. También puede verse afectado por problemas de piel o cálculos en el riñón.
0 comentarios:
Publicar un comentario